En el deporte, el rendimiento y la prevención de lesiones son fundamentales. La deshidratación puede afectar negativamente ambos aspectos.

En el deporte, el rendimiento y la prevención de lesiones son fundamentales. La deshidratación puede afectar negativamente ambos aspectos.

May 18, 2023

May 18, 2023

En el mundo del deporte, el rendimiento y la prevención de lesiones son dos aspectos fundamentales que todo atleta o persona activa busca optimizar. Uno de los factores que puede influir de manera significativa en ambos aspectos es la deshidratación. En este artículo, exploraremos en detalle cómo la deshidratación puede afectar negativamente a tu rendimiento deportivo y aumentar el riesgo de lesiones, y te daremos algunas recomendaciones para mantenerte hidratado y maximizar el potencial de tu práctica deportiva.



Deshidratación: un enemigo silencioso


La deshidratación se produce cuando nuestro cuerpo pierde más líquidos de los que ingiere, y puede tener efectos perjudiciales en el organismo. Durante la actividad física, especialmente en situaciones de esfuerzo prolongado o en ambientes calurosos, el cuerpo pierde líquidos a través del sudor. Si estos líquidos no se reemplazan adecuadamente, los niveles bajos de hidratación pueden llevar a una disminución del rendimiento y a un mayor riesgo de lesiones.



Impacto en el rendimiento deportivo


La deshidratación afecta negativamente el rendimiento deportivo de diferentes maneras. En primer lugar, reduce la capacidad del cuerpo para regular la temperatura interna, lo que puede llevar a un aumento del estrés térmico y una disminución del rendimiento físico. Además, la falta de hidratación disminuye la resistencia y la fuerza muscular, afectando el rendimiento en actividades que requieren resistencia o potencia.


La deshidratación también puede tener un impacto en la concentración y el enfoque mental, lo cual es fundamental en muchas disciplinas deportivas. La falta de líquidos puede causar fatiga, disminución de la claridad mental y dificultad para tomar decisiones rápidas y precisas. Todos estos factores tienden a limitar el rendimiento general del deportista y a afectar, en consecuencia, a su capacidad para alcanzar su máximo potencial. Algo que tratamos de evitar cada día en Trip2Balance.



Riesgo de lesiones


Como hemos visto anteriormente, la deshidratación aumenta el riesgo de lesiones de diferentes formas. En primer lugar, cuando el cuerpo está deshidratado, los tejidos se vuelven más rígidos y menos flexibles, aumentando la probabilidad de sufrir distensiones musculares, desgarros o calambres. Además, la falta de hidratación puede afectar la lubricación de las articulaciones, incrementando la fricción y la posibilidad de lesiones articulares.


Además, la deshidratación también puede influir en la concentración y la coordinación motora, llevándonos a emplear una técnica deficiente y predisponiéndonos a sufrir ciertos tipos de lesiones, especialmente en deportes que requieren movimientos rápidos y precisos.



Recomendaciones para mantenerse hidratado


Una hidratación correcta y pautada es esencial para maximizar el rendimiento deportivo y prevenir lesiones. Aquí van algunos consejos prácticos para lograrlo:


  • Beber líquidos antes, durante y después de la actividad física: Es importante asegurarse de estar bien hidratado antes de comenzar el ejercicio. Es necesario beber de forma regular para reponer las pérdidas de líquidos a través del sudor. A esto se le suma la importancia de hidratarse convenientemente después de la actividad física para fomentar la recuperación y reponer los electrolitos perdidos.

  • Conocer tus necesidades individuales: Cada persona tiene requerimientos de hidratación diferentes, por lo que es fundamental que sepas cuales son los tuyos. Factores como la duración e intensidad del ejercicio, el peso corporal y las condiciones ambientales pueden influir en la cantidad de líquidos que necesitas consumir.

  • Elegir las bebidas adecuadas: Aunque el agua es la opción más común para mantenerse hidratado, en casos de ejercicio prolongado o intenso, es posible que sea necesario consumir bebidas deportivas que contengan electrolitos para reponer los minerales perdidos a través del sudor. Estas bebidas pueden ayudar a mantener el equilibrio de electrolitos en el cuerpo y prevenir la deshidratación.

  • Establecer un plan de hidratación: Es recomendable establecer un plan de hidratación antes, durante y después del ejercicio. Por ejemplo, beber aproximadamente de 500 ml a 1 litro de líquidos dos horas antes de comenzar la actividad física, consumir de 150 a 250 ml de líquidos cada 15-20 minutos durante el ejercicio y beber al menos 500 ml de líquidos después de finalizar la actividad física para reponer las pérdidas. Hace unos días te enseñamos a calcular tu tasa de sudoración, para hidratarte correctamente, antes, durante y después de una maratón.

  • Prestar atención a las señales de tu cuerpo:Nuestro cuerpo es sabio y nos da pistas de que algo no marcha bien cuando estamos deshidratados. Presta atención a señales como la sed, la boca seca, el mareo, la fatiga excesiva o la disminución repentina de tu rendimiento Ante estas señales, detente inmediatamente, hidrátate y descansa si es necesario.

En resumidas cuentas, la deshidratación puede tener un impacto significativo en tu rendimiento deportivo y aumentar el riesgo de lesiones. Si buscas maximizar tu potencial deportivo y prevenir problemas de salud, asegúrate de mantenerte hidratado en todo momento. Conocer las necesidades individuales, saber elegir las bebidas correctas y establecer un plan de hidratación, son aspectos clave para garantizar una hidratación óptima.